El coste financiero que provoca actualmente la morosidad en España

La subida de tipos de interés y la elevada inflación provocan un elevado coste financiero en caso de impago.

Los datos estadísticos revelan que los impagados comerciales se han situado en el nivel más alto en quince años. Los impagados interempresariales derivados de operaciones comerciales se han duplicado e incluso triplicado en algunos sectores. Hay que tener en cuenta que la morosidad ocasiona un coste financiero ya que las empresas deben financiar durante un período adicional los saldos de clientes no cobrados al vencimiento. Este coste que se produce como consecuencia del atraso en el cobro de las facturas depende de los tipos de interés y del coste medio ponderado de los recursos que emplea el proveedor para financiar su activo circulante. Por este motivo las épocas en que los tipos de interés son elevados, el perjuicio económico provocado por la morosidad es mucho mayor que cuando los tipos son bajos.

Pero además del coste financiero ocasionado por los retrasos en el pago hay que tener en cuenta dos factores adicionales:

  • La pérdida del valor del dinero provocado por la inflación.
  • Los gastos de gestión de cobro necesarios para conseguir la recuperación del crédito impagado.

Un coste que no hay que olvidar es la pérdida de valor adquisitivo cuando la empresa no puede cobrar la factura en la fecha del vencimiento contractual. Aunque el cliente pague la totalidad de la factura, se produce una pérdida de valor adquisitivo, en función a los días transcurridos hasta que el cliente abona íntegramente la factura impagada. En el caso que se produzca un impago de 10.000 euros, y el cliente se demore tres meses en liquidar la deuda, el proveedor cobra la suma adeuda en unidades monetarias, pero el valor que representan las monedas ingresadas en su caja no es el mismo que hace 90 días. Esto es lógico si uno se hace la siguiente pregunta: ¿Cómo se mide el valor de una moneda?; la respuesta es “por su poder de compra”. Bajo este punto de vista no puede considerarse que los 10.000 euros cobrados tres meses más tarde tengan el mismo valor adquisitivo que en la fecha teórica del vencimiento de pago, puesto que en la práctica se debe medir el valor de una moneda en relación a la cesta de la compra que sirve para calcular el IPC. El mejor patrón que tenemos para ver el valor de una unidad monetaria es la cesta de la compra. Por supuesto en fases de la economía en las que existe una fuerte inflación y un aumento generalizado de los precios, la morosidad de los clientes es todavía más perjudicial.

En consecuencia uno de los principales problemas que están sufriendo en estos momentos las empresas acreedoras es el elevado coste de la morosidad, provocado por el encarecimiento paulatino del coste del dinero, la elevada inflación y el incremento de los gastos de gestión. Un método empírico muy sencillo que propongo para calcular de forma aproximada los costes que provoca la morosidad es el de establecer una tasa de coste financiero provocado por un impago del 12% anual.

Esta tasa incluye el coste financiero que le supone a la empresa la financiación adicional y la pérdida del valor adquisitivo provocado por la inflación. Además esta tasa del 12% anual dividida por doce meses es muy fácil convertirla en un 1%  mensual que es un porcentaje muy cómodo para realizar los cálculos. De este modo se puede incrementar en un 1% el valor de la factura impagada por cada mes de retraso. Así pues para tener una idea bastante aproximada del coste que supone la morosidad, se puede incrementar en un 1% el importe de la factura por cada 30 días que transcurren sin  poder cobrarla. Así, el coste que genera el impago de una factura de 10.000 euros y que el deudor paga con 4 meses de retraso se eleva a los 400 euros, pero si el moroso tardara 6 meses en abonar la factura, el coste sería 600 euros, ya que el contador virtual del gasto financiero va marcando inexorablemente un importe diario. 

Por supuesto hay que tener en cuenta que el efecto acumulativo durante un ejercicio económico, de miles de facturas que se cobran más tarde de lo previsto, puede ser letal para la situación financiera de un negocio en la actual coyuntura y en especial si las facturas son de importes elevados.

Artículo escrito por: Pere J. Brachfield, profesor de EAE Business School, director del Centro de Estudios de Morosología y autor de Memorias de un Cazador de Morosos.

España: Previsiones Económicas según “The Economist “

logo economistCon fecha 6 de Septiembre The Economist publica las previsiones de “consenso” entre un panel de analistas, los cuales incluyen a ABN AMRO, BNP Paribas, Citigroup, Economist Inteligence Unit, HSBC, ect.   Estimaciones que considero más fiables que las del Gobierno, Banco de España, Comisión Europea e incluso los famosos Servicios de Estudios de alguna entidad.

Los datos referentes a España no son muy alentadores:

  • Crecimiento PIB: Rango de 0,6% y 1,8% para 2008 y -0,7% y 1,6% para 2009
  • Inflación: 4,5% (2008) y 3,1%(2009)
  • Balance por Cuenta Corriente como % del PIB: -9.8% (2008) y -8,9%(2009)

El hecho que el crecimiento del PIB se muestre como horquilla me lleva a una reflexión simple: Si el Gobierno reacciona y aporta y promueve agilidad, estaremos en la horquilla alta. En caso que el Gobierno siga convencido que la culpa de todo la tienen los alienígenas, el año que viene tendremos crecimiento de PIB negativo.

En post sucesivos estudiaremos la fuerte correlación que existe entre el crecimiento del PIB y la morosidad en España: Si nos ponemos en el peor de los casos (-0,7% para 2009) la morosidad será para la economía española como un devastador huracán caribeño.

Lo hemos comentado en muchas ocasiones: Anticiparse a los escenarios negativos es cualidad de buenos gestores. Por tanto, cuiden la calidad de las ventas, procedimenten los cobros, utilicen informes comerciales y ortorguen a la morosidad una imporantancia proporcional al problema que puede causar en su negocio.

Lo del Déficit exterior no produce preocupación, sino pánico, terror, crujir y rechinar de dientes. Llevamos lustros arrastrando este problema estructural y su solución va a ser más complicada en la situación actual. En términos relativos al PIB, el déficit español dobla a Estados Unidos , país cuya economía ve al déficit exterior como su principal problema …

previsiones the economist españa 2009 2008

El BCE sube tipos

Con el Euribor a 12 meses en máximos históricos, el Banco Central Europeo ha decidido subir los tipos de interés hasta situarlos en el 4,25%. Esta es la primera subida desde hace un año, y con esta medida se intenta frenar la creciente inflación en Europa, que se espera que ronde el 3,5% para este año.

Uno de los objetivos primordiales del BCE es la estabilidad de precios y su presidente, Jean Claude Trichet, ve claros signos de inestabilidad y de incrementos en los riesgos inflacioncitas.

Esta subida de tipos nos afectará a todos (y no solo a los que estemos hipotecados) y a nivel empresarial nos va a encarecer aún más los costes de financiación, con lo que el acceso a nueva financiación se va a complicar aún más. Si estaba difícil conseguir un préstamo/crédito, ahora lo será más. Y si lo conseguimos, será más caro.

Y aunque Trichet afirma que este no será el principio de una escala de tipos, no hay que descartar al menos una nueva subida de otro cuarto de punto para este año… aunque creo que será para el último trimestre.

Los tipos al alza, la inflación desbocada, liquidez mínima en circulación, menos consumo, incremento de los costes fijos (¡viva la electricidad!)… pero no hay crisis… A ver si baja el Gobierno a la arena y nos explica donde está esa España en la que viven sin crisis, porque en la España que vivo yo suben los costes, bajan las ventas, y los clientes no pagan… en mi España sí hay crisis… ¿vosotros en qué España vivís?